In which I feel a little bit better
May. 12th, 2008 11:26 pmPor fin estoy de vuelta en casa... fue un largo fin de semana. Pequeños detalles me han subido el ánimo como el haber encontrado ropa nueva esperándome sobre mi cama. Sí, porque soy vana y me dejo comprar con ropa (e-es que está linda ;w;). Además había pastel en el refrigerador.
Además logré al fin terminar el dibujo que tenía atascado desde septiembre. Eso... bueno, me dice muchas cosas. Una mala que es que mi cerebro dañado va de mal en peor y me toma meses acabar un simple dibujo porque tengo que pasar horas repitiendo la misma línea una y otra vez. Y otra buena que es que con perseverancia puedo lograrlo (aunque me tome cantidades de tiempo ridículas y los resultados no sean lo que pretendía).
Fui por mis zapatos, y Ley de Murphy, se habían vendido los de mi número. Espero que me los traigan, los dejé encargados. Me los volví a probar en la tienda y verdaderamente me gustan muchísimo.
Amo ver mi calendario y no ver ninguna prueba esta semana. Es maravilloso. Quiero hacer mil cosas, aunque de seguro haré la mitad con suerte. Estoy cansada.
Sí, sigo perdiéndome en las nimiedades de la vida diaria buscando distraer mi alma boba que desea lo que no puede tener. Da igual. Estamos resignadas, ¿cierto alma?
Tengo ganas de ir a tomarme un helado gigante con muucha crema y baño de chocolate y mostacillas de colores. Creo que lo necesito un poco.
Además logré al fin terminar el dibujo que tenía atascado desde septiembre. Eso... bueno, me dice muchas cosas. Una mala que es que mi cerebro dañado va de mal en peor y me toma meses acabar un simple dibujo porque tengo que pasar horas repitiendo la misma línea una y otra vez. Y otra buena que es que con perseverancia puedo lograrlo (aunque me tome cantidades de tiempo ridículas y los resultados no sean lo que pretendía).
Fui por mis zapatos, y Ley de Murphy, se habían vendido los de mi número. Espero que me los traigan, los dejé encargados. Me los volví a probar en la tienda y verdaderamente me gustan muchísimo.
Amo ver mi calendario y no ver ninguna prueba esta semana. Es maravilloso. Quiero hacer mil cosas, aunque de seguro haré la mitad con suerte. Estoy cansada.
Sí, sigo perdiéndome en las nimiedades de la vida diaria buscando distraer mi alma boba que desea lo que no puede tener. Da igual. Estamos resignadas, ¿cierto alma?
Tengo ganas de ir a tomarme un helado gigante con muucha crema y baño de chocolate y mostacillas de colores. Creo que lo necesito un poco.